Luego de una semana en baja, el dólar arrancó la semana con un salto de 80 centavos en su cotización con respecto al cierre del viernes. Al final de la jornada, la divisa estadounidense se ofreció a $41,40 para la compra y $43,40 para la venta. En los días previos, la divisa había acumulado una baja de 25 centavos y llegó a ubicarse en los niveles más bajos de los últimos tres meses.
Según el promedio que elabora el Banco Central, entre los distintos bancos y entidades financieras, la moneda norteamericana cotizaba a mitad de la jornada a $40,83 para la compra y $43,08 para la venta. El salto se dio en los últimos minutos antes del cierre.
«El dólar repuntó ante una mayor demanda por cobertura, la cual apareció tras la apreciación de las últimas semanas. Este proceso, combinado con una aún elevada inflación (más allá de la desaceleracion), está llevando a un acelerado deterioro de la competitividad, algo que comenzaba a despertar preocupaciones», destacó el analista Gustavo Ber.
«Más cuando viene alimentado principalmente del ingreso de dólares financieros tentados por el carry trade, los cuales pueden determinar perjuicios a futuro en capacidad de generar divisas genuinas para el país. Este repunte llega de una mas decidida corrección en los ADR, la cual se venía demorando tras las fuertes revalorizaciones de las últimas semanas. Los bonos por ahora siguen firmes, e incluso con exitosos deals corporativos, porque hay desesperacion global por capturar rendimientos a raíz del tono dovish de la Fed2″, destacó Ber.
Según la agencia Reuters, el peso se depreció como respuesta de una importante liberación de circulante tras la segunda licitación de bonos a corto plazo realizada por el banco central (BCRA), comentaron operadores.
El Banco Central, en tanto, colocó otros USD 30 millones por cuenta del Tesoro a $42,1334 promedio en la segunda subasta de la apertura de la semana.
La tasa de referencia diaria de las Leliq para el día se ubicó al 58,833% anual a 7 días, mediante una absorción de 186.366 millones de pesos en dos licitaciones, frente a vencimientos por $207.018 millones; de este modo, el Banco Central liberó al mercado de pesos poco más de $20.000 millones.
En tanto, el riesgo país de la Argentina volvió a sus niveles mínimos desde finales de marzo, ante un panorama político más favorable para el oficialismo de cara a las elecciones de octubre, según dijeron operadores a Reuters. Esta baja se da al mismo tiempo que la plaza financiera opera sin mayores presiones en un panorama cambiario calmo.
El riesgo país argentino, relevado por el banco JP Morgan, caía cuatro unidades a 774 puntos básicos, luego de marcar un nivel de 770 unidades cerca del mediodía, frente a los 1.014 puntos intradiarios anotados a comienzos de junio.
La mejora del riesgo argentino también está relacionada a las «definiciones políticas de cara a las elecciones presidenciales y datos positivos desde el frente macroeconómico», explicaron desde la banca de inversión Puente.
El índice líder Merval de Buenos Aires caía un 1,9%, a 41.941,64 unidades, ante las esperadas tomas de ganancias luego de marcar la semana pasada un nivel máximo histórico de 43.292,62 unidades. El mercado transita una «saludable toma de beneficios», estimó la correduría Rava en un informe.
El viernes último, el Banco Central continuó convalidando recortes en la tasa de Leliq, y el promedio diario pasó de 59,161% a 59,011%.
Los certificados de acciones locales que cotizan en EEUU tenían pérdidas importantes rondando las 15:30. Los papeles más «golpeados» son los de los bancos y energéticas: Edenor perdía 6% y Banco Macro, 5,7 por ciento, por ejemplo.
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