Neuquén
Creo que el nuestro debe ser el único país del mundo donde comprar moneda extranjera es un virtual delito.
El desquicio ha llegado a tal grado de intensidad que la moneda más requerida, el dólar, ha sido dividido en diez (por lo menos) categorías distintas.
Tanto el dólar, como el euro, los francos suizos, los yenes, los rublos, la libra esterlina, etc., son mercancías que uno debería tener derecho a comprar sin restricción alguna.
En ello están incluidos los derechos de libertad de comercio, de industria lícita, de comprar y vender, el de propiedad, el de disponer uno de su dinero como le plazca.
En consecuencia, las prohibiciones, limitaciones y requisitos de la más variada índole que se opongan a ello no son más que muestras irrefutables de la discrecionalidad y el abuso de poder que impera en nuestro país.
Por eso es válida y pertinente la afirmación que sostiene que las causas fundamentales de nuestro atraso son la violación sistemática de la Constitución y la falta de cumplimiento de sus cuatro postulados básicos: libertad, seguridad, capital y trabajo.
Joaquín Bertrán
DNI 5.433.822
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